Dicen que de bien nacidos es ser agradecido, así que, aunque no tenía previsto aparecer por aquí hoy (a pesar de que este 13 de enero mi ya marido y yo cumplimos nuestros diez primeros años juntos), lo hago para dar las gracias a Drea, una amiga a la que conocimos (y a su marido) hace año y pico en el primer EBE al que fuimos. Desde entonces, nos seguimos en la distancia (ventajas de los blogs) y hoy, cuando leía lo último que había escrito, me he llevado una más que agradable sorpresa, porque en su blog matriz, Bloglobosofía (digo matriz porque tiene unos cuantos más la muy prolífica, dicho sea con toda la envidia, sana, del mundo), ha homenajeado a este humilde blog, que nació como otra tontería más de las muchas que perpetramos y que justo ayer, como ella (que va siguiendo los aniversarios de todos los blogs que sigue y la siguen, para recomendarlos y felicitar a sus autores, así de tierna es) nos recuerda (no, no habíamos caído), cumplió justo un año.
Y este post es para ella, para agradecerle que se acuerde de nosotros (y también para que los que la visitan no aterricen en un sitio que hace un mes que no se actualiza) y para recordar a los que pasan por aquí, sean asiduos o no, que aún nos queda por contar nuestro viaje a NY (o terminar de hacerlo), cómo han sido estos diez primeros años juntos, la historia de los coches de bomberos y todas las tonterías que se nos ocurran, que son, por desgracia, muchas más de las que nos da tiempo a contar. Pero, en este segundo año de San Eustaquio, intentaremos encontrar el tiempo para hacerlo. Gracias a los que habéis llegado hasta aquí.
Jope luego dices que te saco los colores, pues anda que tú… Me alegro de que haya servido para que sigáis actualizando, jeje. Besitos.
Me gustaMe gusta
No he dicho nada que no sea verdad, y creo que me he quedado corta con los elogios 😛 Y sí, tu recomendación ha servido de acicate para que vuelva por aquí, así que a lo mejor te contrato de motivadora, jeje.
Me gustaMe gusta